A mi modo de ver, los discos de Franz Ferdinand han venido de más a menos en cuanto a su calidad musical, creo que el primer material que editaron sigue siendo el mejor en su carrera, no obstante su acto sobre el escenario es uno de los más divertidos y que valen la pena ver.
En su más reciente visita a la ciudad de México en la cual venían promocionando su última placa de estudio en donde tienen algunas buenas canciones y otras no tanto, acudí con cierta curiosidad acerca de cómo sería la presentación a cinco años de distancia de su primer visita a nuestro país en la cual me parecieron fabulosos con instrumentación básica y canciones muy bailables. Ahora utilizan más el recurso del sintetizador y teclados y bailan menos, pero aun así siguen provocando toda clase de sensaciones en el recinto donde se presenten.
Poco hay que decir que no se haya escrito ya; Kapranos se gana a la gente a las primeras palabras que salen de su boca, el público se amontona hasta el frente del escenario para bailar a gusto y sentirse más cerca de la banda, el sonido falló a la tercer canción, la selección de canciones fue perfecta y el momento de tocar la batería entre los cuatro integrantes al mismo tiempo fue un buen acto con el que la gritería no se hizo esperar para dar un show completo en cuanto a entretenimiento se refiere. Afortunadamente tocaron varios temas del primer disco, pocas del segundo y completaron el set de casi dos horas con las del disco a promocionar en esta ocasión. Momentos o puntos altos creo que fueron pocos como en el caso de “Takeme Out”, pero eso sirvió para que en general el concierto fuera bueno y no irregular
La verdad es que pase una gran noche disfrutando de una banda que hace muy bien las cosas arriba del entarimado y la cual me agrada escuchar y ver, si en su primer visita salí convencido de lo que vi, lo que disfrute me confirma que me gusta esta banda, solo espero que en su próximo disco se acerquen a la calidad de lo que mostraron en su debut.
Tal vez lo único malo de la noche fue el incidente con los representantes de la ley, que se vio solucionado con una “multa amistosa” pero es algo tan común en este país que al mismo Kapranos le sucedió esa noche.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario