LA BARRANCA EN EL METROPOLITAN

No estaba muy convencido de acudir al concierto de La Barranca el pasado 28 de agosto, no conocía el nuevo material y por alguna razón no me sentía con muchas ganas de ir. Finalmente accedí convencido por una amiga, y quizás también por eso me di a la tarea de redescubrir la música de esta magnífica banda mexicana al oír sus discos anteriores. Recordé lo mucho que me gusta “Día Negro”, todo el “Denzura” y corroboré que debo escuchar mas seguido el “Providencia” y “El fluir”, después de todo eso me sentí preparado para un concierto mas de la barranca en el Metropolitan (excelente sitio para conciertos).

El tradicional recorrido por canciones anteriores y la presentación de las nuevas, los invitados más que especiales (André, Toussaint, Brown) fueron haciendo un recital lleno de virtuosismo, de entrega y de lenguaje musical en el mas amplio sentido del término. Se confirma que Aguilera es el motor creativo del proyecto, que Fong pesa mucho mas de lo que su bajo nos ofrece y que el cambio de baterista hace brillar las canciones con una luz propia y llena de creatividad y belleza.

Toussaint tiene una voz poderosa y educada, se nota el gran entendimiento que hay con la banda y a pesar de que solo coreó y canto algunos fragmentos, opaco a aguilera en el ensamble de las voces.

Agradezco que me hayan convencido de acudir a dicho evento, no solo por el gran espectáculo que vi, sino porque también el compartir este tipo de momentos con la persona ideal hace que sea aun mas agradable, una buena banda, buena compañía y el ver y disfrutar con los cinco sentidos el nuevo disco “Ciudad Piedad”, sin duda recordé lo que hacen seis cuerdas, los tambores, teclas y sobretodo lo mas importante; talento. Si La Barranca esta fuera de las masas no es por falta de creativiadad a la hora de empuñar los instrumentos, sino por la falta de público crítico y capaz de disfrutar música de calidad, es una pena pero a la vez me siento contento de que los que estábamos ahí era por gusto y entrega a un proyecto inigualable.

Tres horas y alrededor de 30 canciones de una banda que esta fuera de las listas de popularidad pero que el séquito de fans que los sigue es fiel y siempre a la espera de lo que tengan que entregar.