viernes, septiembre 15, 2006

THE STROKES EN EL PALACIO DE LOS DEPORTES


Este quinteto proveniente de Nueva York parece ser el prototipo perfecto para una banda de rock; pantalones ajustados, chamarras de piel, tenis Converse, cabello largo y desarreglado, cigarro en la boca, tragos a un lado del escenario, canciones duras, melodías pegajosas y solos efectivos. El baterista con el cabello alborotado y brincando en cada canción, el bajo potente, duro y seco sin mas efectos que la técnica misma, las guitarras con dos o tres efectos distintos, y el guitarrista con la pose de tener el citado instrumento hasta abajo de la cintura, (nick es una tremenda garrocha) y con el típico vocalista que es carita y que todas le gritan cada vez que aparece en las pantallas (también otra garrocha el Casablancas).
Todos estos elementos fueron los que se conjugaron en el primer concierto que dieron los Strokes el pasado 31 de agosto, que con un palacio que no se llenó, con un desorden por parte de los acomodadores que hicieron un desmadre al cerrar la sección E y querer meter a la gente en la sección D (en la que yo estaba), y con un pésimo sonido en el que rebotan los bajos de la peor manera y los agudos apenas se podían oír, así fue este concierto en el que por cierto abrió Porter, con una actuación bien hecha pero con unas ínfulas de rockstars (que si se la quitaran podrían tener mejores canciones).

Así a las 10 de la noche empezó el platillo musical con Juiciebox, y el bajo potentísimo y demoledor todos en la euforia brincando y saltando dándose un atracón con los riffs que emanaban de esos amplificadores y que hacían la delicia de los asistentes, pasando por canciones como Heart in a Cage, You only live Once, 12:51, Reptilia, Modern Age, Last Nite, Is This It?, Hard to Explain, etc. Se obtuvo un concierto a la altura de lo se merece el publico mexicano, tal vez el estilo de The Strokes, sea un tachado de que nada propone, de que es copia de otras bandas también neoyorkinas, que etc, etc, etc.
Lo que no se puede negar es que dentro de su presentación, ellos demostraron que son buenos músicos, la ejecución en sus respectivos instrumentos lo demostraba, se notaba que tienen un largo camino recorrido, al saber como manejar a un publico que con solo verlos en el escenario se les entrego, así fue el concierto de The Strokes, por actitud, técnica, éxitos, carisma no parábamos, el único gran detalle fue el de siempre, la pésima sonorización.

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